En qué consiste
Una prueba de esfuerzo tiene como objetivo el diagnóstico de salud (confirmando la ausencia de enfermedades, principalmente cardiacas) y la valoración de la capacidad funcional del deportista (la capacidad para hacer ejercicio). Se trata de una exploración complementaria de uso habitual en la medicina del deporte.
La medición de los niveles de ácido láctico (lactatos) durante una prueba de esfuerzo, nos permite conocer su concentración en la sangre, ofreciendo información sobre el metabolismo energético en distintas cargas de trabajo, de forma que podemos conocer la potencia anaeróbica del deportista.