En qué consiste
Es una prueba no invasiva que analiza el flujo sanguíneo en las arterias que llevan sangre al cerebro, como las carótidas y las vertebrales. Esta prueba permite identificar obstrucciones, placas de ateroma o estrechamientos significativos que podrían aumentar el riesgo de accidentes cerebrovasculares.
¿Cómo se realiza?
• Se coloca gel sobre el cuello y el médico desliza el transductor para visualizar las arterias.
• No requiere preparación previa y es completamente indoloro.
¿En qué casos debe realizarse?
• Pacientes con antecedentes de accidente cerebrovascular.
• Seguimiento de pacientes intervenidos de estenosis carotídea.
• Screening en personas con múltiples factores de riesgo cardiovascular, como hipertensión, hipercolesterolemia, tabaquismo, enfermedad arterial periférica o antecedentes familiares de ictus.