La mastoiditis es una infección que afecta el hueso mastoideo, situado detrás del oído. Aunque hoy en día es menos común gracias al uso de antibióticos, sigue siendo una afección que puede derivar en complicaciones graves si no se trata a tiempo. Se produce como consecuencia de una infección en el oído medio que se propaga al hueso mastoideo, provocando inflamación y acumulación de pus en la zona.
Este problema es más frecuente en niños, aunque también puede afectar a adultos. Sus síntomas pueden incluir dolor intenso en la zona del oído, fiebre, supuración y enrojecimiento de la piel. Sin un tratamiento adecuado, la infección puede extenderse y afectar estructuras cercanas, lo que convierte a la mastoiditis en una afección que requiere atención médica inmediata.
¿Qué es la mastoiditis?
La mastoiditis es una infección del hueso mastoideo, una estructura porosa ubicada detrás de la oreja, que forma parte del sistema de cavidades del oído medio. Esta infección suele ser consecuencia de una otitis media aguda mal tratada o resistente a los antibióticos. La inflamación en esta zona puede generar presión en las estructuras cercanas y afectar la audición, además de aumentar el riesgo de que la infección se propague a otras áreas, como el cerebro o los nervios craneales.
La progresión de la mastoiditis puede llevar a la formación de abscesos dentro del hueso, lo que debilita su estructura y favorece la acumulación de secreciones purulentas. Cuando esto ocurre, los síntomas pueden agravarse rápidamente, provocando un deterioro general del estado de salud del paciente. La infección no solo compromete la función auditiva, sino que también puede provocar alteraciones en el equilibrio y generar un intenso malestar en la zona afectada.
Las principales causas de esta infección auditiva
La mastoiditis se desarrolla principalmente como una complicación de la otitis media, cuando las bacterias responsables de la infección atraviesan las estructuras del oído y alcanzan el hueso mastoideo. Este proceso inflamatorio puede ocurrir cuando la otitis no recibe un tratamiento adecuado o cuando el organismo no responde de manera efectiva a los antibióticos administrados. En algunos casos, la presencia de una infección recurrente en el oído medio puede predisponer a la aparición de esta afección.
Existen ciertos factores que pueden incrementar el riesgo de padecer mastoiditis. Entre ellos se encuentran los antecedentes de infecciones frecuentes en el oído medio, la debilidad del sistema inmunológico debido a enfermedades crónicas o deficiencias nutricionales, y el uso inadecuado de antibióticos que puede contribuir al desarrollo de resistencia bacteriana. También pueden influir las condiciones anatómicas que dificulten el drenaje normal del oído, favoreciendo la acumulación de secreciones y el crecimiento de microorganismos patógenos.